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Patricia, no he leído más que tres líneas de tu carta y por lo que veo, en esencia, estás de bajón, necesitas mimos, y has venido a log85 a buscarlos porque tus amigos del feisbuc y del tuenti pasan de tus estados tipo ?que paren el mundo que yo me bajo?. Patri, es usted una mujer, y a no ser que sea un orco de mordor, siempre encontrará algún desesperado que no le importe acogerla en sus brazos para prestarle consuelo y todas las atenciones que usted necesite.
Si esta amenaza de suicidio va enserio, entonces mi reflexión toma otro rumbo. Si esto es de verdad, entonces sé perfectamente cómo te sientes.
Verás Patri, hará como dos meses, llegó a España la gira de mi cantante favorito, Luis Fonsi. El concierto que tenía más cerca sería el que se celebraría en Murcia, así que me dispuse a organizar todo para ese día. Mi ?cami? con su foto y un corazón y una pancarta en la que le pedía que me tirase una toalla. Pasaron las semanas, y un lluvioso martes por la mañana me llamó la presidenta del club de fans de Luis del que soy secretario, para decirme que el concierto de Murcia se cancelaba.
Me quería morir. Ese día no fui a clase, me quedé en casa de bajón viendo pelis de Mattew McConaghey tipo ?Cómo perder a un chico en diez días? o ?Novia por contrato?. Pero las películas se acabaron y me lancé a mi i-Pod. Ni el canto de Chayanne en mi oído pudo calmar mi corazón roto por Fonsi.
Se acabó el cine, se acabó la música, pero mi vacío seguía ahí. Comprendí entonces que nada tenía sentido. Me lancé a mi myspace para publicar lo que había comprendido en ese rato, tenía que acabar con mi vida.
A las tres horas de haberlo publicado todavía nadie me había escrito nada. Llamé a todos mis conocidos y ninguno me lo cogía. Me quería morir y además tendría que hacerlo sólo, pues a nadie le importaba.
Lo haría envenenándome, sí, así lo haría. Me marché a Carrefour Puerta de Alicante a comprar algún raticida porque me parece cada día más deleznable el comercio tradicional de toda la vida. ¡Que se mueran los tenderos!
Bueno, que me distraigo?el caso es que llegando a Pryca paso por delante de Massimo Dutti y encuentro un giro?.EL GIRO DE MI VIDA. Un foulard tipo cashmere marrón que me enamoró cual mujer sollozando con el rimel corrido en mis brazos.
Comprendí entonces que mi vida volvía a tener sentido. Esa pashmina combinaba perfectamente con una ?cami? gris metal que me había comprado en mi anterior intento de suicidio. Una leve sonrisa se me escapó frente a ese escaparate y sin quererlo entré a la tienda, y un guapísimo dependiente trajeado, cual cura evangélico, me unió en santo sacramento con aquel trozo de delicada tela que había dado de nuevo sentido a mi vida.
SIEMPRE HAY UN MOTIVO PARA VIVIR. Puede ser un foulard marrón de cashmere, una camisa china a rayitas azules y blancas, o unos pantalones amarillos con ribetes verdes en forma de jazmín. La vida es algo maravilloso y delicado.
Sé más que nadie en esta santa casa cómo se siente usted, Patri, así que no dude en preguntar a Lanshor o demás cómo contactar conmigo para ayudarle. Porque no se va a suicidar, porque en el fondo usted también sabe que una tarde caminando por Maisonnave se puede enamorar de unos botines de charol en rosa fucsia de Mustang o de un bolso en cuadros marrones y rojos campestres a juego con su pulsera Pandora. Porque sabe que hay amor, que TODAVÍA, queda amor.
Búsqueme, a tod@s nos ha hecho llorar un hombre alguna vez.
PD// O no me haga caso y suicídese, pero de verdad. Nos hará un favor a todos desocupando un poco la red y sus padres ganarán en casa un cuarto de baño. Si quiere hacerlo todo más intrigante, péguese con un cenicero en la cabeza para después acabar lanzándose a cualquier río andaluz. Nadie la encontrará y sus ?amigos? entonces sí que la nombrarán en numerosos eventos por tuenti, los cuales yo desecharé, porque las cosas que le pasan a otra gente me importan una real mierda.
Arriba la espera MJ, si se hubiese dado más prisa no se le habría metido en medio Daniel Jarque. En cualquier caso Amy Winehouse nos va a enterrar a todos.
Lo dicho, búsqueme o suicídese a lo grande, pero no deje al mundo indiferente. No deje que escasee el glamour. Muchísimas gracias.
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